María Isabel de Braganza, o cómo tu marido puede robarte el éxito
una vez más.
María Isabel fue una princesa de la Casa Real de Portugal, hija primogénita del rey Juan
VI de Portugal y luego reina consorte de España como
segunda esposa de Fernando VII, "el
deseado", que era su propio tío, y tuvo, en total, cuatro esposas.
Amante del arte y de la cultura, realizó varias acciones
encomiables en pro de aquellas, como propiciar que la Academia de San Fernando
impartiese clases también a las mujeres, o impulsar una iniciativa, que ya
habían propuesto muchas veces, pero que nadie había llevado a cabo. Y esta es,
claro está, crear un Museo Real en Madrid, (mi localidad) donde reunir las grandes obras del patrimonio
español. El Museo del Prado.
Pues bien, esta lucha que mantuvo en aras de la cultura
española le sería arrebatada durante mucho tiempo, atribuyéndose el éxito,
claro está, a un hombre. El rey Fernando VII, quién realmente no fue más que el
que pagó dicho proyecto. La historia ha sabido poner finalmente a María Isabel
en su lugar, pero de una forma tardía y sin la consideración que merecía. Y ya
lo dijo Billy Wilder, “Ninguna buena obra queda sin castigo”, pues la pobre
mujer, moriría dando a luz, a la corta edad de 21 años, faltando otro año para
que el Museo se inaugurase. No estaba para recibir los vítores y los aplausos,
y otro se apropió de ellos.
Hoy día, en la wikipedia, una página cuya rapidez y sencillez
la sitúan como una de las más visitadas a la hora de informarse sobre alguien,
se puede leer sobre Fernando VII:
“Apoyado por su segunda esposa, Isabel de Braganza, Fernando
retomó la idea de José I de crear un Museo Real de Pinturas, y decidió
convertir en tal el edificio que Juan de Villanueva había creado como Gabinete de Historia Natural.
Gracias a su iniciativa y financiación personal, nacía así el actual Museo
del Prado, inaugurado en presencia del propio
monarca y su tercera esposa el 19 de noviembre de 1819”.
Como puede verse, seguimos siendo víctimas de una estafa. Tal
vez sea el peso del cargo de “Rey” más que el género, lo que hace ceder la
balanza hacía Fernando VII como ideólogo del famoso “Museo del Prado”, pero habiendo
pasado un siglo, y con todas las pruebas con las que contamos (véase la
bibliografía que expongo), deberíamos reconocer a cada cual, sus éxitos particulares,
o no avanzaremos en la lucha por la igualdad, pues la historia es excesivamente
machista.
La contribución de María Isabel va mucho más allá de lo
cuantificable. Contribuyó en el ensalzamiento de las artes y de la cultura
española, y también, impulsó el mecenazgo de su marido, propiciando su
grandeza. Cuando llegó, se la describía como “fea, gorda y extranjera”. Era un
tiempo en el que las reinas se limitaban a estar calladas, a pasear por sus
jardines, y a no entrometerse en los asuntos del reino. Pero esta mujer sorprendió
a todo el país con su pasión y su dedicación. Y de no ser por su prematura
muerte, hubiera sido un grandísimo ejemplo para las mujeres de la época. Fijémonos,
no ya en la creación de un museo como el Prado, sino en fomentar la educación
de la mujer. Cosas como esa marcan la diferencia en la lucha por la igualdad de género.
El personaje histórico que expongo, no es sino una mujer más
dentro de una larga lista, cuya obra y esfuerzo fueron borrados, apropiados, o
infravalorados por el hecho de ser mujer. Al menos ahora comenzamos a verlas de
verdad.
Fuentes:
https://es.wikipedia.org/wiki/Fernando_VII_de_Espa%C3%B1a#Fernando_VII_y_las_artes_y_las_ciencias
https://es.wikipedia.org/wiki/Mar%C3%ADa_Isabel_de_Braganza
https://www.mujeresenlahistoria.com/2013/04/la-reina-del-prado-maria-isabel-de.html
http://dbe.rah.es/biografias/13031/isabel-maria-francisca-de-braganza-y-borbon
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